Los garbanzos tostados en casa es una tradición que ha sido practicada en muchos hogares de todo el mundo durante siglos. Este proceso consiste en cocinar los garbanzos hasta que estén secos y ligeramente dorados, lo que les da un sabor más intenso y una textura más crujiente.
El por qué de los garbanzos tostados
Tostar garbanzos en casa se remonta a la antigüedad, cuando se utilizaba para almacenar los garbanzos durante largos períodos de tiempo. Tostarlos les daba una vida más larga y los hacía más fáciles de transportar y almacenar. Además, también se utilizaban para hacer diferentes platillos, como hummus y falafel.
A lo largo de los años, la tradición de tostar garbanzos en casa ha evolucionado y se ha adaptado a diferentes culturas y estilos de vida. En la actualidad, muchas personas siguen tostando garbanzos en casa porque les gusta el sabor y la textura que les da. También es una forma de asegurarse de que los garbanzos sean frescos y sin conservantes, algo que no siempre se encuentra en los productos envasados.
La costumbre de hacerlos
La tradición de los garbanzos tostados en casa es una costumbre antigua y valiosa que ha sobrevivido a lo largo del tiempo. Ya sea para almacenarlos o para utilizarlos en diferentes recetas, tostar garbanzos en casa es una forma de garantizar un producto fresco y de calidad. ¡Pruébalo en casa y descubre por qué es una tradición que nunca morirá!
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Así tostamos los garbanzos
Lo primero que tenemos que hacer es precalentar el horno a 200º C
Escurrimos bien los garbanzos, los secamos con papel de cocina y los vamos poniendo en un bol.
Ahora vamos a mezclar muy bien todas las especias excepto el zumo del limón. Nosotros hemos utilizado una picadora donde hemos puesto el azúcar, la sal, el ajo en polvo, la pimienta, el comino, la cúrcuma y el pimentón dulce.
A continuación ponemos el zumo de limón y lo mezclamos con las especias.
La mezcla que nos ha salido la vertemos en el bol con los garbanzos y lo mezclamos bien para que queden todos bien impregnados
En una bandeja de horno con papel vegetal, ponemos los garbanzos intentando que queden bien esparcidos formando una sola capa
Metemos la bandeja en el horno durante 40 minutos. Durante ese tiempo vamos a remover los garbanzos cada 15 minutos para que se hagan bien por todos lados.
Sacamos del horno, dejamos enfriar y retiramos los pellejos de los garbanzos que se hayan desprendido.
Ponemos en nuestro recipiente favorito para aperitivos y a disfrutarlos.
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Instrucciones
Lo primero que tenemos que hacer es precalentar el horno a 200º C
Escurrimos bien los garbanzos, los secamos con papel de cocina y los vamos poniendo en un bol.
Ahora vamos a mezclar muy bien todas las especias excepto el zumo del limón. Nosotros hemos utilizado una picadora donde hemos puesto el azúcar, la sal, el ajo en polvo, la pimienta, el comino, la cúrcuma y el pimentón dulce.
A continuación ponemos el zumo de limón y lo mezclamos con las especias.
La mezcla que nos ha salido la vertemos en el bol con los garbanzos y lo mezclamos bien para que queden todos bien impregnados
En una bandeja de horno con papel vegetal, ponemos los garbanzos intentando que queden bien esparcidos formando una sola capa
Metemos la bandeja en el horno durante 40 minutos. Durante ese tiempo vamos a remover los garbanzos cada 15 minutos para que se hagan bien por todos lados.
Sacamos del horno, dejamos enfriar y retiramos los pellejos de los garbanzos que se hayan desprendido.
Ponemos en nuestro recipiente favorito para aperitivos y a disfrutarlos.